Agricultores vascos y andaluces bloquean las bases logísticas de Mercadona
Durante estos días estamos asistiendo a masivas movilizaciones del sector agrario alrededor de toda España y varios países de Europa. Este martes se ha sumado a las protestas el sindicato alavés UAGA, que reclama medidas para frenar «la frustración y el malestar creciente del sector primario por las difíciles condiciones y la asfixiante burocracia que generan las normativas de la UE».
Con esta premisa se llenaron las carreteras de Álava de cientos de tractores que colapsaron la circulación. Ya al mediodía, la movilización se trasladó al polígono industrial de Júndiz, donde se encuentra una de las bases logísticas de Mercadona. Los agricultores bloquearon la entrada a este centro con la proclama «si el campo no produce, la ciudad no come» y propiciaron un amplio despliegue de la Ertzaintza.
Asimismo, en Málaga también hemos podido ver como los manifestantes han tratado de impedir la entrada de camiones a los centros logísticos de Mercadona y Día. Entre otras cosas, las movilizaciones reclaman la flexibilización de la PAC y la ampliación de la Ley de la Cadena Alimentaria para impedir que las grandes cadenas de supermercados puedan vender sus productos con unos márgenes de ganancias tan desorbitados.
Según un reciente estudio de FACUA, los alimentos básicos aumentan hasta un 875% su precio desde que son adquiridos por las distribuidoras en el campo hasta que los compramos en una de las grandes cadenas de supermercados de España. En productos como el huevo, el margen entre el campo y el supermercado ha crecido de un año para otro en un 65%, algo que las grandes cadenas achacan al aumento de los costes intermedios.
Sin embargo, el resultado final es que los agricultores cobran lo mismo o menos por su producto y este se vende cada vez por un precio mayor en el supermercado. Según el último informe de la OCU al respecto, el precio de la cesta de la compra se incrementó en el último año un 14,1%, que sumado al 15,4% del anterior año nos da una subida del 30,8% en tan solo dos años.
Por su parte, KANTAR informa de que Mercadona acumula casi el 27% de la cuota de mercado de distribución, que sumada a la de grupos como Carrefour, Lidl o Día supone prácticamente el 50% del total del mercado. Esta situación de oligopolio propicia que los agricultores deban trabajar y aceptar los precios que estas empresas ofrecen, ya que de lo contrario pueden perder la posibilidad de vender su producto.
Con todo, organismos como FACUA creen necesaria una intervención en los precios y los márgenes de ganancia, mientras que el sector agrícola se manifiesta por una ampliación de la regulación estatal al respecto. Lo que está claro es que se hacen necesarios mecanismos para conocer de qué manera se establecen los precios en los supermercados y, de esta manera, poder analizar el crecimiento de la diferencia entre el precio de compra al productor y el de venta al consumidor.