El Maccabi de Tel Aviv no es bien recibido en Gasteiz
El partido de Euroliga disputado el jueves entre el Maccabi de Tel Aviv y el Baskonia estuvo marcado por las consignas de los aficionados vascos en solidaridad con el pueblo palestino. A la derrota del equipo israelí se le sumaron toda una serie de cánticos durante el encuentro que denunciaban la masacre de Gaza, en la que han sido asesinados más de 27 mil palestinos desde el 7 de octubre.
Las horas previas al partido ya estuvieron marcadas por la presencia de pancartas y banderas de Palestina en el centro de Gasteiz. La Ertzaintza preparó un enorme dispositivo policial para un partido que se esperaba, como mínimo, tenso. Por su parte, las plataformas BDZ Araba e Indar Baskonia pedían a la afición vasca entrar cinco minutos más tarde al Buesa Arena en señal de denuncia y repartieron antes del encuentro un total de mil banderas de Palestina entre los hinchas del Baskonia.
Los miembros de BDZ Araba leyeron hace unos días un comunicado en el que catalogaban al Maccabi como el «el máximo exponente deportivo del Estado de Israel, no solo por el hecho de ser israelí sino porque su dirección y sus jugadores han destacado en los últimos años por participar de forma activa en campañas publicitarias del ejército de ocupación israelí». De la misma manera, pidieron a la grada vasca que cada vez que el equipo visitante tuviera el balón se gritara «genocidio».
Así, cinco minutos después del arranque del partido, vimos como cientos de aficionados entraban en el estadio con banderas y con un enorme mosaico en el que se podía leer «Free Palestine!». A lo largo del partido pudimos escuchar toda una serie de cánticos en solidaridad con la situación de la población palestina y en denuncia al asedio de Israel sobre la Franja de Gaza: «Israel, genocida», «Estado sionista, Estado terrorista» o «Palestina askatu!», entre otros.
La afición vasca aprovechó el evento para reivindicar el cese de los ataques sobre los palestinos ante los jugadores del Maccabi, a los cuales pudimos ver hace unas semanas calentando en Valencia con una camiseta que decía «Bring them home now» –traedlos de vuelta a casa ahora–, refiriéndose a los israelíes secuestrados por Hamás el pasado 7 de octubre.