Miguel Arias Cañete “lidera” el fondo de inversión que se beneficia del aceite de oliva a 10 euros el litro
El aumento exorbitante en el precio del aceite de oliva virgen extra (AOVE) está causando estragos en los bolsillos de los españoles mientras que algunos pocos se están beneficiando enormemente de esta situación. En muchos supermercados, el AOVE se está vendiendo por encima de los 10 euros por litro. Pero, ¿qué hay detrás de este encarecimiento repentino? Una combinación de factores, entre ellos, una grave sequía que ha diezmado la producción de aceitunas y ha afectado desproporcionadamente a los agricultores y cooperativas más vulnerables. Pero no solo.
Hay quienes han encontrado en esta crisis una oportunidad para enriquecerse: Beka Finance, una gestora de activos española, ha visto en la crisis del aceite de oliva una oportunidad de oro para aumentar sus beneficios. Mediante la creación de un fondo de capital riesgo dedicado a la inversión en plantaciones de olivos con tecnología de vanguardia, Beka Finance ha logrado mantener sus niveles de producción y aumentar sus ganancias.
Miguel Arias Cañete, ministro de agricultura con el Partido Popular de Aznar y de Rajoy, es su presidente de honor. Fue en 2021 cuando el ex ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, así como ex comisario europeo de Energía y Acción por el Clima, Cañete, se unió a Beka Finance en lo que parece una puerta giratoria como presidente de honor del comité de inversión de un nuevo fondo de capital riesgo “centrado en la agricultura sostenible”.
En su nuevo rol, Arias Cañete comenzó a “colaborar” con el equipo de profesionales de Beka Finance brindando “su experiencia” en temas como el cambio climático, la sostenibilidad, la compensación y la comercialización de créditos de carbono. Además, contribuye en “la búsqueda y seguimiento de oportunidades de inversión”, como detalló la firma en un comunicado oficial publicado antaño.
Pese a todo, la inversión en olivares no fue idea original de Beka Finance. Ante la “falta de opciones de inversión rentables en otros sectores”, parece que la compañía decidió incursionar en el agronegocio, utilizando métodos financieros para maximizar sus ganancias. Esta estrategia ha sido altamente lucrativa para la gestora y para los clientes de la banca privada quienes han obtenido rendimientos anuales del 20% o más.
Fernando de la Vega, uno de los máximos responsables de ventas de Beka Finance, explicó lo siguiente: “En 2019 veíamos que los tipos de interés seguían muy bajos, que había mucho interés por inversiones alternativas a los bonos y la Bolsa, y que había una burbuja en los tradicionales fondos de capital riesgo, por eso empezamos a buscar nuevas opciones para nuestros clientes”.
Mientras tanto, los pequeños agricultores y trabajadores del campo, que dependen del sector del aceite de oliva para subsistir, se enfrentan a dificultades cada vez mayores. La sequía, los costos de producción en aumento y la falta de apoyo gubernamental están llevando a muchos al borde de la ruina.
La gestora está considerando tres posibles escenarios para los próximos meses: En el más conservador, se espera que el precio caiga al final del año a 7 euros por kilo (posiblemente debido a una disminución en la demanda); en un escenario intermedio, se espera que alcance los 9 euros por kilo; y en un escenario más agresivo, podría llegar a los 12 euros por kilo, lo que haría que el “oro verde” se vuelva aún más valioso. “La idea de negocio era buena. Nos aliamos con Bolschare como socio industrial para lanzar Beka & Bolschare Iberian Agribusiness Fund y hoy ya hemos invertido más de 50 millones a través del fondo y la sociedad de capital riesgo vinculada al proyecto” detalló De la Vega.
Recordemos que en España el precio del aceite de oliva virgen extra se ha duplicado durante el último año ya que la producción se ha reducido a la mitad. El propósito de las inversiones es establecer olivares “modernos y superintensivos” en un país donde la mayoría de las explotaciones son gestionadas por pequeños productores, quienes aún realizan la cosecha de manera manual y trabajan de manera colectiva para producir aceite de oliva virgen extra.
Algunas organizaciones como la OCU y la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) han hecho públicas denuncias sobre el lucro que rodea al precio del aceite, argumentando que el producto disponible en los supermercados fue adquirido a precios considerablemente más bajos de lo justo para los productores. Por este motivo, han instado a las autoridades a implementar mecanismos de regulación y a establecer observatorios de costos de producción y de márgenes comerciales.
El aceite que se comercializa actualmente en los supermercados fue adquirido por los envasadores a precios notablemente bajos, según datos de PoolRed, que señalan un promedio de 5,25 euros por litro. Teniendo en cuenta que el aceite de oliva virgen extra puede alcanzar precios de hasta 12 euros en los supermercados, esto representa un incremento de más del 200% respecto al precio original pagado al agricultor.
Además, la OCU ha señalado que el precio del aceite de oliva en España está significativamente por encima del de nuestros países vecinos. Un análisis revela que el precio medio de la marca blanca en España es un 6% más alto que en Italia, un 16% más que en Francia y un 27% más que en Portugal, según datos comparativos.