Revuelta de Mujeres en la Iglesia exige "disculpa y rectificación" a Argüello por sus palabras sobre el alcalde de Vita
La Revuelta de Mujeres en la Iglesia de Madrid ha dirigido este fin de semana una carta al arzobispo de Madrid, José Cobo, en la que exige una "disculpa y rectificación" por parte del presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Luis Argüello, por sus "justificaciones" de los cánticos del alcalde de Vita, Antonio Martín.
En concreto, la Revuelta de Mujeres en la Iglesia tacha de "inaceptables" las declaraciones realizadas por Argüello el pasado martes, en una entrevista concedida a Europa Press, en las que calificaba de "reprobable" el cántico con "elogio" de la "violencia" entonado por el alcalde de Vita pero pedía ponerlo "en su contexto" de fiesta popular, a altas horas de la madrugada y después de haber bebido.
"Toda la opinión de lo que puedan ser motivos, a través de las intervenciones de músicas, de letras, de cantos, pues de algo que haga un elogio de cualquier tipo de violencia me parece reprobable, pero también creo que hay que poner las cosas en su contexto, es decir, que conociendo lo que es las fiestas de muchos pueblos, conociendo lo que pasa a altas horas de la madrugada después de haber bebido esto o lo otro, hay que situarlo en ese contexto", indicó Luis Argüello a Europa Press.
La Revuelta de Mujeres en la Iglesia ha tachado estas declaraciones de "inaceptables" y dice que "ponen de manifiesto el machismo, y el abuso de poder justificando lo injustificable".
"Estimado obispo: La Revuelta de Mujeres en la Iglesia de Madrid, queremos manifestarle nuestra indignación y preocupación ante las declaraciones del presidente de la Conferencia Episcopal Española, obispo Luis Argüello, el pasado 4 de septiembre, a raíz del espectáculo burdo, soez y depravado del alcalde de Vita alardeando de pederastia infantil, específicamente a niñas", señalan en la carta.
En concreto, muestran su rechazo a "las justificaciones" del obispo Argüello que, según denuncian, "tratan de contextualizar un delito de exaltación de la pederastia y de la cultura de la violación hacia las niñas y las mujeres, ensalzado por varones en torno a una fiesta".
Además, añaden que hubieran deseado "que desde la jerarquía eclesiástica se alzara la voz en contra de la violencia" hacia las mujeres y niñas. En su lugar, consideran que las declaraciones del obispo "atacan" su "dignidad como mujeres, como ciudadanas y como creyentes".
"Las palabras del obispo, en su intento de contextualización y justificación, son inadmisibles, instigan al delito y dañan a toda la ciudadanía, muy especialmente, a la comunidad eclesial", insisten.
Por ello, consideran que "si después de estas declaraciones el obispo Argüello no rectifica y pide disculpas no debe seguir presidiendo la Conferencia de obispos".