El show electoral de Pedro Sánchez #ElCierre

La máquina del fango que denuncia el Presidente tiene lamentablemente “motor Pedro Sánchez”. Porque uno no puede denunciar el fango y, a la vez, mantener encendida la máquina que lo difunde
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Ay Sánchez! Ay ay ay… Yo voy a agradecer al presidente Sánchez que en su nuevo show electoral, por lo menos, no nos haya obligado a un intermezzo de cinco días de reflexión otra vez. Tal parece que la reflexión anterior, pese a que no tuvo como resultado ninguna idea de cómo actuar efectivamente contra la máquina del fango, le valió, eso sí, para notar que la política epistolar podía servirle de cara a fortalecer su imagen. Sería tierno si no fuera peligroso. El Presidente Sánchez nos regala una nueva carta dirigida a todos nosotros, pero la carta es más importante, no por lo que dice explícitamente, sino por aquello que podemos leer entre líneas. Y lo que revela no es muy auspicioso.

El Presidente Sánchez nos regala una nueva carta dirigida a todos nosotros, pero la carta es más importante, no por lo que dice explícitamente, sino por aquello que podemos leer entre líneas. Y lo que revela no es muy auspicioso.

Hay quien dice que el Presidente Sánchez recién sufre en carne propia —o mejor dicho, en la de su esposa— los efectos del contubernio entre los jueces del bloque reaccionario y los reaccionarios con carnet de periodistas. En efecto, la orquesta dirigida por espacios de poder en este país contra él y su esposa responden a ese lawfare que hemos denunciado en más de una ocasión aquí. Pero también es cierto que el Presidente, aunque lo esté viviendo en carne propia, ha encontrado en estos hechos una oportunidad para despegar un show electoralista, antes que implementar medidas para acabar con lo que él llama “máquina del fango”. En otras palabras, la máquina del fango que denuncia el Presidente tiene lamentablemente “motor Pedro Sánchez”. Porque uno no puede denunciar el fango y, a la vez, mantener encendida la máquina que lo difunde. Es decir, uno no puede decir que el contubernio golpista apesta y sentarse luego en las cloacas que inundan de su hedor y su putrefacción las casas en este país. Es decir Ferreras, señor Presidente. Ese operador de las cloacas al que usted concedió una entrevista luego de reflexionar durante cinco días en que obviamente tomó una decisión: La de usar el lawfare en beneficio electoral en lugar de denunciarlo para combatirlo. Pedro Sánchez sí tomó una decisión producto de su reflexión, entregarnos al fango. Esa fue su decisión.

Dice el Presidente que le parece sospechoso que el juez Peinado notifique que cita a su esposa a declarar justo cinco días antes de las elecciones europeas. Que resulta cuando menos llamativo e inédito que desde el poder judicial se interfiera de este modo en un proceso electoral. A ver, señor Pedro Sánchez, hay muchas formas de intervenir en la democracia de este país y fracturarla. y no todas son necesariamente en contexto electoral. ¿Cuándo fue el primer caso de lawfare contra Podemos? Justo después de irrumpir con cinco eurodiputados en Bruselas y causar alarmas en todas las tiendas políticas, mediáticas y económicas del régimen. ¿Eso no fue intervenir electoralmente? O, ¿Cuándo surgió la trama PISA? Esa basura mediática creada entre los Indas de turno y los Ferreras burdos con el objetivo de neutralizar y demonizar a Pablo Iglesias, entonces líder de Podemos, justo cuando se negociaba la posibilidad de conformar el primer gobierno de coalición en 2016. ¿No recuerda que usted prefirió pactar con Rivera pese a que era el líder de la cuarta y no la tercera fuerza política? ¿Acaso no sirvió el “informe PISA” para contribuir a destruir la imagen de quienes debieron ser desde entonces miembros de ese gobierno? ¿Ahí no había lawfare? ¿Ahí no había intervención de jueces y medios reaccionarios para subvertir el resultado de las urnas? Algunas tenemos memoria, presidente. ¿Qué son la trama Rusa y la actuación del “juez” Manuel García Castellón reabriendo el caso Tsunami Democratic y apuntando contra Puigdemont en plenas negociaciones de cara a la ley de amnistía y la conformación de este gobierno? ¿Acaso no hay una intención deliberada y clara por evitar que gobierne? Es decir, por subvertir la aritmética parlamentaria que es resultado de las urnas.

Es francamente agotador que nos obligue a verlo de protagonista en un show victimista que le interesa para crecer en las encuestas. El lawfare en este país es una obviedad, pero lo que también resulta obvio es que usted se beneficia de ello. Se benefició en 2016 y se beneficia hoy. Porque ha decidido entregarnos a la máquina del fango. Su pasividad ante estos atentados contra la democracia no es sólo indignante, es cómplice.

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Pero beneficiarios políticos directos del lawfare en este país ha habido varios y no sólo el PSOE. Vamos a poner las cartas sobre la mesa y ya que está de moda inaugurar cartas a diestra y siniestra va la mía, pero no es a la ciudadanía sino a la señora Yolanda Díaz.

A la vicepresidenta segunda del gobierno, que en sus redes sociales ha señalado a Pedro Sánchez que “esto no va de cartas, sino que a la derecha se le para con hechos” y en la misma línea, a la portavoz Elizabeth Duval que ha señalado que “esto no va de cartas, sino de tomar cartas en los asuntos urgentes”, les pregunto, ¿Hay algo más urgente que preservar la democracia en este país? No. Porque es esa democracia la que permite construir una alternativa al bloque reaccionario. Lo urgente es precisamente defender la democracia amenazada por jueces y cloaqueros. Entonces, señora Díaz, la pregunta es sencilla, ¿Hasta cuándo va a seguir sentándose en el plató de uno de los operadores del lawfare en España, como es Antonio García Ferreras? Porque en efecto esto no va de cartas, pero tampoco va de tuits hipócritas. Repito, ¿Hasta cuándo usted va a seguir beneficiándose de las horas en pantalla que le brinda un corrupto del periodismo? Su credibilidad para denunciar lawfare, máquina del fango e incluso para hablarnos de democracia, es de cero mientras siga sonriéndole a quienes inundan de mugre este país. Repito ¿Hasta cuándo va a sentarse con la mugre de este país? Y lo mismo va para el señor Urtasun, el señor Errejón, la señora Duval, el señor Bustinduy, la señora García, la señora Maestre... Cuando dejen de legitimar a Ferreras, tuiteen.

El presidente Sánchez decía ayer que desde el Partido Popular estaban desesperados ante las europeas y por eso planteaban una absurda moción de censura aliándose con el mismo Puigdemont que han demonizado todo este tiempo. Pero en Ferraz tampoco están muy tranquilos, la misiva presidencial da cuentas de la necesidad que tiene por utilizar lo que haga falta para crecer en una campaña que al régimen se le está haciendo larga. Porque defender la guerra, las armas, mantener la complicidad pasiva con el genocidio, plantear más Europa —es decir más de lo mismo—, apostar por medidas de austeridad y hasta plantearse integrar una comisión europea con nada menos que con el fascismo de Meloni, es difícil de sostener mucho tiempo. De ahí que hoy tengamos cóctel de distracciones con una carta cuyo efecto es nulo para resolver un problema claro en la democracia de este país.

Dice el presidente Sánchez que quedan aún más de tres años de gobierno y que no se va, es una lástima que tengamos que conformarnos con un presidente cobarde frente al lawfare y al golpismo de togas y periodicazos pero, por suerte, en Europa no hace falta conformarnos.

Hoy defiende a Begoña Gómez mucho mejor quien denuncia el lawfare y propone algo para acabar con él que su esposo que ha decidido utilizar electoralmente incluso a ella. Respondan a su carta vacía con votos, con votos llenos de valentía. Valentía que sí va a defender la democracia y que empieza por pararles los pies a los operadores del golpe en lugar de sentarse con ellos a legitimarlos brindándoles entrevistas y sonrisitas.


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