Berlín busca hombres jóvenes dispuestos a defender la capital con un arma en la mano

La última información que chocaba al público de habla castellano era el plan secreto de Alemania para transportar 800.000 soldados al frente del este en el caso de que Putin decidiese atacar a la OTAN, no porque ésta le suministre armas a Ucrania con las que el país ataca sus radares nucleares, sino por la naturaleza malvada de los rusos. En Berlín la población se despierta con informaciones de este tipo contra los demonios rusos desde hace meses. Ya se ha convertido en rutina. En medio del bochorno del verano, el resto de Ministros casi ha desaparecido, pero el de Defensa está sudando la camiseta: sigue visitando día sí, día no, cuarteles, centros de formación, fotografiándose junto a la tropa, hablando de la amenaza rusa y de la necesidad de aumentar aún más el presupuesto de su Ministerio a toda costa. Y es que en la guerra no hay vacaciones.

La información sobre la movilización de cientos de miles de tropas provinene del llamado "Plan Alemania", de cuya existencia Diario Red ya informó, y en cuyas páginas se detalla el papel central que Alemania debe jugar ante un posible ataque ruso a la OTAN. Un plan que se ha concretado en unas cien reuniones secretas por todo el país, entre el ejército y empresas, la Cruz Roja, los servicios sanitarios y otras organizaciones, y que está recogido en un documento de más de mil páginas y con graves implicaciones para el país y para Europa que no se han discutido en modo alguno en el parlamento. Uno de sus responsables, el general del ejército André Bodemann, explicaba en una entrevista con la televisión ntv a principios de julio que dicho plan "nos afecta a todos a partir de 2025" y que Alemania sería el centro de operaciones de la organización transatlántica en su despliegue hacia el este. Las tropas norteamericanas llegarían a través de Holanda y pasarían por todo el país en su camino hacia el frente, asegura el general en la entrevista, como un ejemplo, para lo cual sería necesaria la implicación de toda la sociedad en su paso por el territorio y para el avituallamiento.

El representante del Bundeswehr emitió en la entrevista una serie de cuestiones un tanto dudosas. Aseguraba que Rusia atacó el gasoducto de Nord Stream, una afirmación que no ha sido corroborada, ya que la investigación sigue en marcha y, al menos por ahora, la versión oficial de la propia Alemania sitúa la culpa en Ucrania. El general asegura también, sin inmutarse, que Rusia quiere conquistar los estados bálticos. Otra afirmación que sirve para movilizar a la población, pero que carece de una base seria, ya que Putin no ha dicho eso hasta ahora y son especulaciones. Al respecto, comentaba el director de la web alternativa Nachdenkseiten y antiguo consejero del canciller Willy Brandt, Albrecht Müller, que "los sucesores de los socialdemócratas defensores de la política de distensión y paz hoy en día están promoviendo la preparación para la guerra". Y aseguraba que, además, "no cuentan con el apoyo de los votantes", ya que en tiempos de Brandt los votaron casi un 46 por ciento y ahora se encuentran en el 15 por ciento según las encuestas.

La entrevistadora preguntaba al general que para qué es necesario un plan como éste si no nos encontramos en guerra. La respuesta fue espeluznante: "De forma estrictamente jurídica, Alemania no se encuentra en guerra, y ello está bien, pero bajo mi punto de vista no estamos ya en paz". Por supuesto, después de la entrevista, que ha sido criticada por algunos pocos sectores, ni el Ministerio de Defensa ni el gobierno rectificó dicha afirmación. Estamos siendo atacados todos los días en una guerra híbrida, aseguraba, en un discurso que sirve para justificar el aumento de presupuesto militar porque, si estamos amenazados, aunque yo no lo vea, si lo ha dicho la televisión y este hombre con uniforme, pues será verdad. Uno de los ataques, decía, a los que nos enfrentamos a diario es a la "desinformación", en especial en las redes sociales. Así que es de esperar que cuando en 2025 se ponga en marcha el plan se atienda a estos ataques. El problema ya se ve venir: la diferencia entre qué es un ataque y qué es una opinión pacifista o contra el rearme puede diluirse.

Antes de irse de vacaciones, el gobierno alemán quiso dejar atado el presupuesto en el último minuto. La presentación del mismo fue anunciada con muy poca antelación de forma extraordinaria y en medio del verano, lo que dificultó informar sobre tales importantes decisiones. En él queda claro que la prioridad es la "seguridad", entendida ésta como un aumento del militarismo y las fuerzas de seguridad del Estado, mientras la otra seguridad, la social, se recorta y se deja de lado. Alemania va a alcanzar por primera vez el objetivo de la OTAN de dedicar al menos el 2% del Producto Interior Bruto a la defensa y quiere mantener al mismo tiempo el freno de la deuda.

Servicio militar: de entrada, voluntario

El ejército alemán cuenta con unos 181.500 soldados, según datos del propio organismo relativos a 2023. En su gran mayoría se trata de soldados profesionales tras más de una década desde que el servicio militar obligatorio fuese abolido. El Ministerio de Defensa presentó en junio sus planes para la reintroducción de la mili, que consiste, en un principio, en la creación de un registro de todos los jóvenes en edad de hacer el servicio militar. En un primer momento se trata de un formulario que han de entregar y, en base a éste, seleccionarán a una serie de jóvenes para una evaluación médica. Unos 400.000 jóvenes tendrán que responder a las preguntas de un cuestionario obligatorio y, al principio, una décima parte será llamado a la inspección médica.

De este listado, se escogerán los que se crean más aptos según el cuestionario que de forma obligatoria tienen que rellenar todos y se les invitará de forma voluntaria a realizar el servicio militar. En caso de que no se encuentre el número de voluntarios suficiente, se obligará bajo penas a cumplirlo. El Ministro de Defensa Boris Pistorius, del SPD, explicó durante la presentación del modelo que una mayor extensión del servicio militar a todos los jóvenes no es posible, en este momento todavía, debido a que las capacidades para ello en cuanto a cuarteles, formadores y otras cuestiones logísiticas no están disponibles. El Ministro quiere ampliarlas cuanto antes.

Otro de los pilares del rearme alemán son las llamadas “compañía de civiles para la defensa de la patria”, Heimatschutzkompanien, que son grupos de civiles que se entrenan en defensa personal, el manejo de armas y que serían quienes defendieran la capital con un arma en la mano, tal como pedía el comandante Jürgen Karl Uchtmann en una extensa entrevista en el diario Berliner Zeitung. Se espera conseguir una masa de unos 900.000 hombres en su mayoría, entre soldados y los reservistas y civiles instruidos.

Oposición al estacionamiento de misiles hipersónicos

En la cumbre de la OTAN celebrada este verano en Washington, los EEUU y Alemania firmaron un acuerdo para el estacionamiento en suelo alemán de misilies estadounidenses de largo alcance de dos tipos, uno capaz de transportar ojivas nucleares del tipo Tomahawk y los otros del tipo hipersónico. La instalación tendrá lugar a partir de 2026 y Rusia ya ha respondido a dicha escalada con amenazas nucleares. Dentro del propio SPD hay críticas a este paso, peligroso para toda Europa. El jefe del grupo parlamentario del SPD, Rolf Mützenich aseguraba el sábado a la televisión pública ZDF que dichos misiles tienen un tiempo de advertencia muy corto y "suponen nuevas capacidades tecnológicas" que pueden llevar a "una escalada militar no intencionada". Mützenich criticaba también que fuese solo Alemania quien se comprometa a estacionar dichos misiles en toda Europa, con los que se pueden alcanzar objetivos en Rusia en unos pocos minutos. Estas armas serían estacionadas hasta que los ejércitos europeos tengan armas similares. Alemania planea construir su propia arma hipersónica para la marina, un proyecto conjunto con Noruega, para el Ministerio de Defensa presentó al Comité de Presupuestos ha previsto unos 652 millones de euros y estaría listo en 2035.

Buena parte del establishment alemán se dedica desde hace meses a realizar declaraciones irresponsables, alarmistas y que contribuyen a alimentar la escalada militar. Tenemos que derrotar a los rusos, decía literalmente el otrora presidente del partido socialdemócrata, Sigmar Gabriel, a finales de mayo. Rusia debe aprender a perder como lo hizo Alemania en 1945, decía el portavoz de Exteriores del partido de la oposición cristianodemócrata CDU Roderich Kiesewetter, ya en novimebre de 2022. Ambos son miembros de la asociación Atlantik-Brücke, de entendimiento alemano-estadounidense, es decir, un lobby atlantista, de la cual Gabriel es el presidente desde 2019 y de la cual había sido presidente antes de él, el actual presidente de la CDU, Friedrich Merz.

Contra el estacionamiento de los misiles y contra la escalada militar hay varias manifestaciones planeadas en agosto y en septiembre en la capital alemana. Sin embargo, el movimiento pacifista de la sociedad civil está en un muy mal momento y mucho tendría que cambiar para que salgan a manifestarse cientos de miles en Alemania, ya que observamos una radicalización del centro por las medidas militaristas. Las iniciativas por la paz siguen siendo escasas en Europa, que ha decidido apostar todo a quién tiene el arma más grande, mientras figuras derechistas como Viktor Orban o la Alternativa por Alemania se benefician de un discurso de distensión entre su electorado.

La advertencia del presidente serbio Aleksandar Vučic en una entrevista con el medio derechista Weltwoche (en inglés), no es oída por el resto de dirigentes europeos. Vamos directo al desastre, creo que solo quedan unas pocas semanas para evitar la catástrofe, aseguraba el líder, cuyo país tiene aún muy reciente la guerra ilegal de la OTAN. "¿Te gustaría que tu madre volviera en un ataúd?", pregunta  Vučic. "Tu hijo, tu marido, quien sea..." El presidente cree que en Europa hoy  "todos se comportan como grandes héroes, pero no les han dicho a sus poblaciones que van a pagar un precio muy alto".