Diomaye Faye: el presidente de Senegal que reivindica el panafricanismo
El pasado 8 de septiembre un cayuco partía hacia el Atlántico desde la costa de Mbour con más de 100 personas a bordo. El cayuco se hundió al menos 40 muertos y decenas de desparecidos.
El presidente de Senegal, Diomayé Faye visitó Mbour para expresar sus condolencias a las familias de los fallecidos y desaparecidos, algo que contrasta con el silencio del anterior gobierno de Macky Sall respecto a este tipo de sucesos. Faye reivindicó su compromiso para que las condiciones de los jóvenes en Senegal mejoren y eviten que más compatriotas se jueguen la vida: “Son cientos los jóvenes que pierden la vida en el mar, y son estos mismos jóvenes los encargados de construir el futuro”.
El camino de Faye hacia la presidencia y su proyecto anticolonial y panafricanista
La coalición de Diomaye se alzaba con la victoria en las pasadas elecciones de marzo en las que se enfrentaba a la socialdemocracia de Macky Sall, quien llevaba en el poder desde el año 2012. El proyecto del PASTEF (Patriotas Africanos de Senegal por el Trabajo, la Ética y la Fraternidad), el partido del actual líder de la República, es uno de los más revolucionarios del África subsahariana.
La llegada a la presidencia del país del líder panafricanista ha estado plagada de dificultades. En un principio, ni siquiera Faye estaba planteado como el candidato del partido a las elecciones, sino que la candidatura era del actual primer ministro Ousmane Sonko quien era el líder del partido, pero tras ser inhabilitado por cargos de “corrupción a la juventud”, un concepto jurídicamente indeterminado, era su segundo, Faye, quien presentaría su candidatura sustituyendo a Sonko.
Diomaye y Sonko vienen ambos del sector de la inspección de hacienda. En 2014 Sonko fundó el partido y Faye estuvo presente de forma esporádica pero pronto comenzó a involucrarse dentro del partido y su relación con Sonko se estrechó cada vez más hasta convertirse en su mano derecha.
Durante la campaña electoral uno de los lemas más sonados de la campaña fue “Diomaye mooy Sonko” que en wolof, la lengua local de Senegal, significa “Diomaye es Sonko”. Este lema destaca una de las líneas más potentes del partido: no importa la personalidad sino el proyecto y el compromiso con el pueblo.
Diomaye, al ser la mano derecha de Sonko, conocía todas las claves de la línea política del partido, por eso era la mejor opción si el gobierno de Macky Sall, expresidente de Senegal, prohibía la candidatura de Sonko.
Uno de los puntos más destacables del programa político del partido del presidente es el desarrollo de la infraestructura del país desde una perspectiva panafricanista de colaboración regional que ponga fin a la dependencia respecto a los países occidentales. Desde que tomó posesión del cargo, Faye ha priorizado las relaciones con los países vecinos como Mali, Burkina Faso o Guinea Bissau a la vez que ha sido muy crítico con Francia, algo inconcebible en los anteriores gobiernos del país.
El Gobierno también ha dejado claro su compromiso con la causa palestina. Senegal es, de hecho, uno de los 143 países que reconocen a Palestina como Estado.