Vuelven los grupos de matones neonazis en Alemania
Habrá quienes digan que nunca se fueron y tengan en parte razón: los grupos de jóvenes matones violentos de ideología neonazi vuelven a las calles de Alemania. Un último caso ha avivado un debate constante desde hace meses: cuatro jóvenes dieron una brutal paliza el pasado viernes a un candidato del partido sociáldemócrata SPD mientras colgaba carteles para las elecciones europeas en la ciudad de Dresde. El político sufrió varias fracturas en la cara y tuvo que ser operado. El lunes, uno de los culpables se presentó en comisaría con sus progenitores y resultó ser un menor de 17 años. Poco después, la fiscalía alemana revelaba que el grupo tenía relación directa con la extrema derecha. En un principio se había difundido la información de que era un grupo de jóvenes violentos, sin implicaciones políticas. Nada más alejado de la realidad.
Los ataques de grupos neonazis han aumentado y no solo en Sajonia, sino también en Brandenburgo y en Renania del Norte-Westfalia tuvieron lugar la semana pasada ataques a políticos mientras llevaban a cabo su labor de información electoral. Es un ambiente el que se vive en Alemania de amenaza. Tan solo en el estado de Baviera en 2023 tuvo lugar un ataque de la extrema derecha cada tres días. En el 53% de las agresiones el motivo era el racismo. 164 víctimas según las cifras de las autoridades. El aumento de la violencia de los grupos de extrema derecha no se limita a los ataques violentos, también se centra en maltratar monumentos a la memoria de las víctimas de la dictadura nazi. Casi todos los días registra la policía pintadas con esvásticas y otros símbolos en campos de concentración, museos, monumentos o cementerios.
Los jóvenes alemanes se han radicalizado claramente hacia la derecha. Mientras en 2022 eran tan solo el 9% los jóvenes menores de 30 los que afirmaban querer votar por la AfD, en 2023 ya eran el 12% y en 2024 el shock: hasta el 22% votaría a la extrema derecha, según la encuesta anual La juventud en Alemania. El resultado: en dicho grupo ganaría las elecciones la AfD. En el estado de Sajonia, cuya capital es Dresde, donde se produjo el ataque al político del SPD, las elecciones del próximo septiembre auguran también una victoria de la AfD con alrededor del 30% de los votos, aunque la aparición del partido de Wagenknecht le robaría buena parte. En paralelo a esta tendencia, y a diferencia de lo que ocurría con el movimiento identitario asociado a la Alternativa por Alemania, ha aumentado el número de jóvenes que se comportan como los neonazis clásicos, de tal modo que los políticos científicos hablan de una posible vuelta a los años de los bates de beísbol, como se conoce a los años 90, en los que los grupos de neonazis atacaban centros de la izquierda y apaleaban por las calles a sus adversarios politicos.
Propaganda en Tik-Tok y a la puerta del instituto
La cuenta del partido de extrema derecha Alterntiva por Alemania (AfD) cuenta con 417.700 seguidores en la red social de Tiktok, cuyos usuarios son mayoría de jóvenes en Alemania. Más que cualquier otro partido. El candidato de la AfD a las elecciones europeas, Maximilian Krah, tiene 44.000 seguidores envía mensajes como éste a la juventud a través de Tik-Tok: "Nuestros antepasados no fueron criminales". En otros vídeos anima a "no tener miedo de tu profesora de izquierdas, defiende tu opinión". A los jóvenes masculinos les recomienda Krah que sean "hombres de verdad": "Los hombres de verdad son de derechas, tienen ideales y son patriotas". También les dice que "tu madre será pobre" porque el gobierno se gasta el dinero de su pensión en "pagar a los refugiados, para las tonterías del clima y los 53 géneros diferentes". Otro de sus temas favoritos son las "deudas de la Unión Europea con el dinero alemán", que inculca a los jóvenes el una visión manipulada y negativa los países del sur y de sus finanzas que obvia los beneficios que la UE tiene para Alemania. Por supuesto, en sus mensajes no falta la idea del llamado gran reemplazo, un supuesto plan secreto para inundar los países con inmigrantes y acabar con la propia cultura a fin de expropiar a las sociedades de su riqueza y convertir en esclavos a los ciudadanos.
@theyisus_.lyrics
Es menester mencionar que la red social TikTok fue diseñada y lanzada en China e India, especialmente porque el candidato Krah ha sido muy criticado por su relación con el primero de los países. Este martes 7 de mayo tuvo lugar en Bruselas una redada en la oficina de Krah en el Parlamento Europeo, ya que uno de sus trabajadores está acusado de espiar para China. Su asistente suspendido Gian Juo habría espiado desde Bruselas y según la televisión alemana ARD hace una década se habría ofrecido él mismo a espiar para los servicios secretos alemanes a la AfD, pero al parecer no lo contrataron porque temían que fuese un agente doble, lo que ahora parece haberse confirmado. Esta buena brelación de Krah con China, que llama la atención desde hace tiempo al tratarse de un partido de extrema derecha y de un país que dice estar dirigido por un partido comunista, no tiene porqué tener nada que ver con el éxito de la formación en la plataforma china. Sin embargo, no debemos olvidar que no sería la primera vez que se fomentan determinadas opciones políticas en otros países a traves de medios, digamos poco ortodoxos. Al fin y al cabo, la AfD junto con el nuevo partido de Sahra Wagenkecht se oponen al fomento de la guerra en Ucrania mediante la carrera armamentística y no ven a China como una amenaza, a diferencia del gobierno alemán y de la UE.
Ahora bien, el influir en la juventud y tratar de virarla hacia la extrema derecha no es algo exclusivo de la Alternativa por Alemania. Las asociaciones de afectados por la violencia racista observan un aumento en el reparto de propaganda a la puerta de colegios e institutos donde un partido neonazi llamado III Weg (tercera vía, en castellano) reparte códigos QR y tarjetas con enlaces en internet donde alojan su propaganda. Es algo que hacían en los 90 organizaciones como el partido NPD, que repartía CDs con canciones de grupos neonazis. El problema del racismo y el neonazismo creciente en las escuelas e institutos alemanes lleva en la prensa desde hace meses. El verano pasado un escándalo traspasó incluso las fronteras alemanas, ya que dos profesores de un instituto de Brandenburgo se dirigieron a la opinión pública tras tratar de intervenir en su colegio en contra de un grupo de neonazis y encontrarse con la indiferencia e incluso el rechazo de la dirección por una parte y de la sociedad por otra. Según el programa de investigación Kontraste, hasta un tercio de los delitos de odio cometidos por los jóvenes tienen lugar en los centros educativos. Saludos hitlerianos, pintadas con cruces gamadas, insultos racistas, ataques a otras alumnas... están a la orden del día.